Primera prueba a campo de toros
Productores de distintas provincias confiaron en la UCC para realizar una exigente prueba a campo de sus toros de raza Heresford. Esta iniciativa, que surgió de la Asociación Argentina de Criadores de Heresford (región centro oeste) y la universidad, comenzó a fines del año pasado y finalizó el pasado 10 de octubre con un exitoso remate. La experiencia fue productiva y ya se está preparando la segunda prueba que comenzará el mes de diciembre de este año.
Javier Lozano lidera, junto a otros profesionales, el equipo que tuvo a cargo esta tarea. Conversamos con él y nos explicó, entre otras cosas, en qué consiste y nos cuenta sus resultados.
¿Cómo funciona una prueba a campo de toros?
Consiste en mediciones durante un periodo de tiempo, aproximadamente de diez meses, de futuros reproductores machos que llegan al establecimiento al año de edad para luego venderse a los dos años. Durante el periodo entre los 12 y los 24 meses se realizan las mediciones de carácter productivo y reproductivo. Con respecto a lo productivo, se mide la ganancia de peso diario, que es un índice de conversión de comida en kilos de carne; y la calidad de carcasa, que mide a través de ecografías la calidad de su carne. En cuanto a lo reproductivo, se mide la circunferencia escrotal porque tiene alta relación con la fertilidad del macho y es heredable en las futuras crías. También se mide la calidad seminal. A su vez, se hace una calificación fenotípica, a través de las juras. Las juras se realizan en tres momentos del año por tres personas distintas calificadas que evalúan al reproductor según lo que ven en cuanto a su calidad racial, capacidad carnicera, y volumen de músculo. A partir de eso, se los califica. Cada una de estas juras le asignan un puntaje a los toros y el que más suma va quedando en lo más alto del ranking final de la prueba.
¿Cuál es el objetivo de esta actividad?
Con cada una de estas mediciones se realiza un índice que es una fórmula que pondera cada una de las mediciones. La sumatoria final hace que haya un toro que sea superior que el resto. La prueba consiste en distintas mediciones en cuanto a manejo sanitario, nutricional y manejo de campo. Lo que busca medir es la superioridad genética de los toros. Todos los animales reciben el mismo tratamiento pero se expresan de distinta manera entonces lo que se mide es esa diferencia genética. El índice final de todas las mediciones determina cuántos toros salen a la venta, porque no todos se adaptan.
¿Cómo fue la primera experiencia de la UCC?
En esta primera prueba a campo Heresford centro oeste UCC participaron 23 cabañas de las cuales 17 son de la provincia de Córdoba, tres de San Luis, una de Entre Ríos, una de Santa Fe y otra de Buenos Aires. Cada cabaña participó con tres toros. Los recibimos en el establecimiento La Toma, sobre la ruta 19, km 266. Ingresaron a principios de diciembre de 2017 pero la prueba de inicio comenzó un mes después, por la adaptación, el 5 de enero de 2018. El 10 de octubre pasado tuvo lugar el remate en las instalaciones de la Estación zootécnica Santa Julia de nuestra universidad. De los 69 toros que comenzaron solo llegaron a venta 31 porque los niveles de medición y selección fueron muy altos pero a pesar de que muchos cabañeros perdieron posibilidades de venta en este proceso, han quedado satisfechos y estarán participando nuevamente.
¿Cuál es la importancia de iniciativas como estas para la UCC?
A través de esta actividad podemos hacer lo que tanto anhelamos como educadores, que es llevar el aula al campo en donde los problemas no son teóricos sino reales y podemos hacer esta conjunción entre lo académico, lo teórico y práctico. La prueba fue abierta a nuestros estudiantes de la Facultad de Ciencias Agropecuarias y tuvimos una colaboración especial de ellos en la preparación del remate.
Por otro lado, abrir los campos de la universidad a este tipo de integración de la institución educativa con la producción privada, como las distintas empresas que fueron sponsor en las juras y mediciones, y las públicas como fue el caso del Ministerio de Agricultura que apoyó la prueba, es muy importante. Para este desafío contamos con el apoyo incondicional del personal de todos los establecimientos agropecuarios de la UCC. Como universidad estamos contentos con el trabajo realizado en equipo.